La Primera Comunión de Miguel se celebró en la iglesia de San Lorenzo, en el barrio de los bloques, en Zamora.
Pero a Miguel lo conocimos unos días antes, cuando estuvimos con él y su familia en el estudio Mynt, que nos lo habían prestado Javi y Cristina, para hacer algunas fotos para el recordatorio, y allí vimos que a Miguel lo que le gusta es pasárselo bien y divertirse, y para ello no dudó en ponerse la corbata a lo Rambo a la hora de posar.
El día de la Primera Comunión nos acercamos a la salida de la iglesia para hacerle algunas fotos con la familia y allí sus tíos acabaron poniéndolo boca abajo para hacerle la foto de familia.
Como el día de la Primera Comunión es para que los niños se lo pasen bien, jugando, rodeados de los amigos y la familia, y no para marearlos haciéndoles una sesión de fotos y cortándoles el rollo, quedamos unos días después con él, sus padres y hermana, en la plaza de la Catedral para realizar las fotografías para el álbum por la zona del casco antiguo y el Castillo de Zamora.
A Miguel le gusta mucho el fútbol y el día de la sesión nos lo dejo muy claro pues no dudo en llevar su balón y dar unos toques en la plaza de la Catedral y en los jardines del Castillo.
Después de recorrer parte del Castillo y de sus jardines nos fuimos a continuar el reportaje al río, a la playa de los Pelambres, y allí Miguel comenzó haciéndose algunas fotos a la orilla del río, pero no tardó nada en quitarse los zapatos y el reloj y meterse en el agua para pasárselo bien y creo que lo consiguió porque no eramos capaces de sacarlo del agua.
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